Con Jesucristo, a parte de tener vida y vida en abundancia, bendecida en todos los sentidos, ganamos la vida eterna: Una vida donde podremos estar por siempre con Él y ya no habrá más sufrimiento. El Espíritu Santo nos revela el misterio más grande en el evangelio, Cristo resucitado.
Quinta parte de la serie «Vida para siempre» compartida por nuestro hermano y pastor Miguel Muñoz.